martes, 25 de octubre de 2011

Soñar...

Suena el despertador.
Noto un peso sobre mi pecho.

Miro a mi lado y, no puede ser, ¿sigo soñando?
Piel desnuda bajo las sábanas. Piel suave, piel delicada.
Carita de ángel.
Unos párpados tapan esos ojos que, al menos a mi, me vuelven loco.
Pelo rizado...
No. Pellizcándome me paso unos minutos.
No quiero tener esa sensación de bienestar en mi.
No quiero volver a dibujar mi nombre en su espalda.
No, no y no.
Te echo de menos y no lo puedo evitar.
Sé que ha sido difícil y que han pasado ya unos meses pero deseo que esos ojos se crucen con mi mirada y se clave ese brillo que derrochaban cuando sonreías...
Es difícil de entender pero casi todos los días recuerdo ese momento en que tus mejillas eran rosadas, o cuando tus dedos rozaban mi rostro.
No quiero con esto, ni pretendo, que cambie nada.
Pero es así como mejor me siento.
Tal vez sea este resfriado.
O tal vez sea que aún estoy soñando.

No hay comentarios:

Publicar un comentario